Estaba deseando llegar a este espacio.
Hace unos días, leía el aniversario de
en Substack y me he quedado con la sensación de LIBERTAD que da esta plataforma para escribir de lo que uno quiera… De explayarse y solo escribir.Sin días establecidos, solo con constancia, amor y presencia.
Esto ha resonado fuerte en el fondo de mi alma, porque justo eso es lo que me llevó a empezar este CLUB en Substack, y este espacio llamado Bitácora, darme permiso para salir de lo establecido, de lo comercial, de lo que se espera de mí (o más bien lo que yo creo que se espera, ya que muchas veces eso está más en mi mente que en la realidad).
Otra de las cosas, por las que nace FEM CLUB, es para crear comunidad, una dónde lo que importa es sostenernos en el SER Mujer y desde ahí liderar nuestras vidas y negocios.
Y una de las premisas, que tengo para conseguirlo, es poner en valor la flexibilidad y dinamismo en un mundo (el mundo de los negocios) dónde todo se pretende lineal y rígido.
Así que rompo con lo de establecer un día exacto para cada espacio dentro de FEMCLUB y me doy el permiso de FLUIR y estar aquí cuando sienta que tengo algo que darte y compartir, de eso se trata alinear mi negocio y acciones a mi SER, a mi vida y a la energía que tengo activa en cada momento.
El compromiso es que SEMANA A SEMANA estaré aquí y hoy vengo con una nueva Bitácora 😏
Bitácora #8 - NO TODO VALE y todo vale a su vez…
Una de esas contradicciones que me encuentro a menudo en mi camino y en mi negocio.
A veces cuesta lo de concretar qué es exactamente lo que quieres, tus No negociables y los criterios o principios en los que basar tus decisiones… Debido a la dura contaminación que tenemos, en nuestra mente, sobre lo que se tiene o debe hacer, alejándonos de lo que realmente somos y valoramos.
Sin embargo, los NO PERMITIBLES que definen ese “No todo vale” son más fáciles de establecer, al menos así lo vivo yo.
Puedes empezar desde ahí, conectar con tus entrañas y ver por qué cosas no pasas, es decir, qué cosas para ti son un NO rotundo, al menos en este momento, ya que estas listas, a medida que creces y evolucionas, ¡Cambian contigo!
Desde ahí puedes ver que NO TODO VALE ni en las relaciones, ni en la vida, ni en los ascensos o logros, ni en las ventas…
No todo vale con tal de vivir como quieres.
Ejemplo: ocupar una casa porque te da la gana de vivir en una.
No todo vale con tal de estar con quien quieres.
Ejemplo: maltratar y meter miedo para que no quiera irse nunca de su lado.
No todo vale con tal de conseguir un logro.
Ejemplo: Torturar y acabar con personas que piensan diferente, para que no haya una revuelta en un país.
No todo vale con tal de vender.
Ejemplo: conocer tan bien los dolores de un potencial cliente con el fin de usarlos para tocar su vulnerabilidad y hacerle creer que eres la única solución posible.
*Todos son ejemplos fuertes, pero reales.
🧐¿Hasta cuando vamos a estar en control, creyendo que lo único importante es lo que queremos para nosotras, sin tener en cuenta el entorno, los implicados y lo que ellos realmente quieren para ellos? ¿A caso vivimos solos? ¿A caso lo demás y los demás, no cuentan o no importan?
TÚ IMPORTAS ¡SÍ!, eres lo más importante en tu vida y el negocio, pero resulta que ¡No vives sola! Y tu negocio ¡No funciona solo! Lo que haces influye en todos los demás implicados, en el mundo, en la forma en la que se construye el colectivo, los estereotipos, etc.
Por eso, para mí, NO TODO VALE cuando se trata de conseguir un beneficio propio.
Haz el bien y no mires a quién.
Haz lo que quieras, siempre que no hagas el mal a nadie en beneficio propio.
Muchas veces observo como para conseguir algo que se quiere, se usan caminos que tiran por tierra otras cosas o personas, porque hay un empeño de conseguir las cosas para YA y de una forma concreta (más rápida, pero no siempre más consciente), sin mirar en profundidad los efectos de esas acciones.
Efectos internos, al hacer cosas que no resuenan con nuestra alma, solo porque se nos ha enseñado que “así se hace” o por la necesidad de conseguir algo para ya, aun cuando nuestra intuición nos grita que ¡No es por ahí o esa no es la forma! Creando una falta de respeto hacia nosotras mismas.
Efectos externos, cuando no se tiene en cuenta lo que ocasiona en otros y caemos en una falta de respeto al prójimo y lo que nos rodea.
Todo esto nos va mermando por dentro, nos va generando un dolor que a simple vista no vemos, pero que después se va mostrando a través de sentimientos de culpa, contracción, fricción en el canal de dar y recibir, vacíos emocionales y somatización; que no entendemos a veces de dónde vienen (la raíz).
Porque lo anterior, estoy segura de que no se hace por maldad, sino por ego. Esa parte de ti, que quiere conseguir lo que cree, que le va a dar valor propio, felicidad o éxito. Y busca el camino más rápido, fácil o directo para conseguirlo, aun cuando no es el mejor camino.
¿Eso quiere decir que tienes que renunciar a lo que quieres? ¡OBVIO, NO!
La cosa es valorar los diferentes caminos, los efectos y tus no permitibles.
Si hay algo que deseas genuinamente, ¡Es para ti, ya existe para ti! Esto es lo primero que has de entender para que no temas soltar el control.
Como dice “Si es para ti, ni aunque te apartes, pero si no es para ti, ni aunque te atravieses”
La cosa es que hay diferentes caminos para llegar a un destino (logro, objetivo, venta, relación…), no solo esos que nos enseñan.
Caminos que a veces ni siquiera vemos o de los que no somos conscientes.
Caminos que sabemos que están, pero también sabemos que son quizás más lentos, con mayor incertidumbre y que requieren un ejercicio de convicción y certeza de que lo que es para ti va a llegar, en el momento que tenga que llegar y no cuando quieres que llegue o de la forma que quieres que llegue.
Esos caminos requieren ¡Soltar el control! Y confiar en que cuando das con amor, teniendo en cuenta el Todo, las cosas fluyen a tu favor, hacia TODAS las áreas de tu vida, no solo una.
Eh aquí otro punto, el aceptar que a veces lo que no nos llega es porque simplemente no es para nosotras.
Se puede forzar el que llegue. Pero tengo la teoría de que cuando fuerzas algo en un área de la vida, en otra abres un hueco y un vacío difícil de llenar.
Podemos tenerlo TODO ¡Sí, lo creo! De hecho, creo que ahí está la clave del balance. Pero el cómo, cuanto y cuando, es algo que no siempre está en nuestras manos. A veces ese todo puede implicar menos dinero, una empresa más pequeña o simplemente un trabajo por cuenta ajena, todo depende de la persona y su cometido aquí en esta vida.
Y no es cosa de “ley de atracción” ni nada de eso. Si no de sentido común. De entender que existe un dar y recibir, un Yin Yan, una energía femenina y masculina, un SER para hacer que hay que balancear y mantener en danza, no en polaridad.
Creemos que solo existen las formas que nos han enseñado.
Lo que no logramos entender es que nuestra visión es limitada.
Solo abriéndonos a esas formas que más resuenan con nosotras, nuestra intuición y alma, es que podemos dar con esos otros caminos más respetuosos, sostenibles y que aportar un bienestar para todos, no solo un beneficio propio.
ESE ES NUESTRO PODER, COMO MUJER Y COMO SERES HUMANOS.
Para llegar a él y activarlo, hay que soltar el automático. Dejar de comportarnos como seres sin corazón, sin espíritu y sin voz interior.
Llegó el momento de preguntarnos si estamos en el “TODO VALE” o en el “NO TODO VALE”, porque en este último:
No todo vale con tal de vivir como quieres.
Construyes en el día a día tu vida con intención, amor y presencia; para llegar a vivir como quieres, sin llevarte a nada ni nadie por delante.
No todo vale con tal de estar con quien quieres. En vez de querer atrapar o mantener contigo a alguien (pareja, amigo, cliente, etc.), haciéndole creer que eres su única opción o a través del miedo…
Trabajas en ti, en tu relación contigo, tu amor propio, libertad; para atraer a personas con las que conectas, sabiéndote completa y respetando la completitud y libertad del otro. ¡Hasta que se sigan eligiendo, no más allá de eso y está bien así!
No todo vale con tal de conseguir un logro.
Trabajas a consciencia para alcanzar tus objetivos, haciendo tu parte con amor y respeto hacia las personas y el entorno implicado; dejando el resto en manos de Dios, la vida, el universo…
No todo vale con tal de vender. En vez de manipular o tocar en la llaga con tal de vender…
Creas y construyes ofertas que sabes que son poderosas y realmente transformadoras; las ofreces con confianza, constancia y claridad, transmites su potencial y dejas que sea el cliente - que en su poder y sabiduría- el que elija si es eso lo que quiere y necesita en este momento.
¡Hay todo una diferencia! ¿No crees?
¡Todo esto se enriquece mucho más cuando más personas añaden sus visiones! Así que te invito a dejar la tuya y compartirme ¿Qué sentido tiene todo esto para ti? Te leo en comentarios 😏